Estamos disfrutando este martes en Zagreb. Pronto nos vamos camino al escenario principal del festival INmusic.
Fuente: INmusic festival
Y tendría Vd. razón, casi todas las culturas tienen al menos un tipo de palačinka en su repertorio gastronómico. Lo que es común a todas es que se preparan a partir de alimentos básicos, como son los huevos, la harina y el agua o la leche y que se fríen en una pequeña cantidad de grasa. En esta famosa receta zagrabiense rellenamos las palačinke con una mezcla de nueces molidas y de azúcar y las cubrimos con una sabrosa crema de huevos y vino batidos al vapor. En los fríos días de invierno no debería faltar una pizca de canela para un disfrute completo de este famoso dulce zagrabiense.
Ingredientes para 10 palačinke:
Para las palačinke:
2 huevos
250 g de harina
200 ml de leche
100 ml de agua mineral
½ cucharadita de azúcar
1 pizca de sal
Para el vajnšato (espuma de vino):
1 huevo
5 yemas de huevo
90 g de azúcar en polvo
20 ml de vino blanco semiseco
15 ml de aroma de vainilla
Para el relleno:
120 g de nueces molidas
70 g de azúcar
Para espolvorear:
1 cucharadita de canela en polvo
También:
100 ml de aceite de freír
Preparación:
En un recipiente vertemos la leche, rompemos dos huevos, añadimos sal, azúcar y con la espumadera enturbiamos los ingredientes. Después, removiendo constantemente, añadimos la harina poco a poco, vertemos el agua mineral y elaboramos una masa homogénea para las palačinke. En una sartén puesta sobre el fuego, en una cuchara de aceite caliente, vertemos tanta masa como para cubrir el fondo de la sartén y la freímos por ambos lados hasta llegar a un color amarillo dorado, hasta gastar toda la masa. En un recipiente, cocinando sobre el vapor, añadimos 5 yemas de huevo y un huevo entero, azúcar en polvo y con una batidora de mano batimos los ingredientes. Después vertemos el vino blanco y el aroma de vainilla, y seguimos batiendo hasta conseguir una mezcla espumosa. Las palačinke fritas las rellenamos a voluntad con nueces molidas y azúcar, las ponemos en platos, las regamos con vajnšato (espumita de vino) caliente, y espolvoreamos con canela en polvo y las servimos.